Cuando se pregunta cual ha sido el mejor equipo de la historia, suelen aparecer varios nombres: el Brasil del 70, el Madrid de Di Stefano, el Milan de Arrigo Sacchi... y la Seleccion Hungara del 54. Este era un conjunto excepcional. Liderado por Ferenc Puskas, uno de los jugadores con el mas potente y decisivo disparo de zurda jamas visto (Puskas significa escopeta, su apellido real es Purczfeld).
Pero Hungria no era solo Puskas. En el 4-2-4 que se invento el arquitecto del medio terreno Nandor Hidegkuti, que tiene en el centro a Bozsik, un manual del pase, tambien esta Sandor Kocsis, que es considerado el mejor cabeceador de la historia, y por ultimo el fantastico extremo Czibor. Este equipo le habia goleado 6-3 a Inglaterra en la fase de clasificacion (convirtiendose en los primeros en ganarle a los creadores del futbol en su terreno), tenia una racha de 32 partidos invictos (racha que aun permanece), golearono al otro finalista en la fase previa 8-3, en ningun partido bajaron de cuatro goles, y tambien eliminaron a Brasil (ese encuentro se llamo "Batalla de Berna" por su extrema violencia), como al anterior campeon Uruguay.
En frente tenian a un equipo teuton , que en cierto modo, representaba a su nacion mas que ningun otro. Llegaban a Suiza tras ser exlcuidos de la Copa Mundial anterion por los hechos de la Segunda Guerra Mundial. El eje del equipo era Fritz Walter, centrocampista total que habia participado en la guerra y estaba en el final de su carrera. Junto a el, el esqueleto del equipo lo conformaban su hermano Ottmar, pulmon en el medio, con el fino Popistal por detras y los poderosos delanteros Rahn y Morlock.
Cuando el arbitro ingles Ling da el pitido inicial, nadie en el Estadio Wankdorfstadion de Berna duda de la victoria hungara. Y el pronostico parece cumplirse a los seis minutos, cuando Bozsik cede a Kocsis dentro del area, que le pega duro pero da en un defensa y cae mansamente a los pies de Puskas, quien marca el tanto para irse adelante. Dos minutos despues, un lamentable blocaje del portero aleman Turek, cae a los pies de Czibor, que sin oposicion marca el 2-0.
Pero los alemanes seguian dando pelea y poco despues del segundo gol hungaro, el extremo Schaffer llega al pico del area izquierda y cruza el balon razo, Buzansky mide mal y Max Morlock lanzadose al suelo con los pies hacia delante recorta distancias. Y caundo se acerca el descanso, Fritz Walter patea un corner desde la izquierda que Rahn empala y convierte el empate.
Cuando empieza el segunda tiempo, se comienzan a ver dos cosas cuyo peso acabara siendo decisivo al final del partido. La primera es que la lluvia que habia caido durante todo el encuentro habia vuelto pesado el cesped del estadio, lo que dificulta el juego preciso y de toque que caracteriza a los hungaros, mientras favorece el despliegue fisico, que hoy mas que nunca, caracteriza a los alemanes. El segundo tiempo fue mas parejo que el primero; los marcajes mixtos de Herberger empiezan a pesar en los futbolistas hungaros, Ottmar Walter seca Bozsik y su hermano Fritz se dirige con acierto en la ultima ofensiva alemana. Faltando ocho minutos, Schaffer roba el balon y se lo cede a Fritz, quien a su vez se lo envia a Helmut Rahn; el ariete pisa el aria perpendicular y con la zurda envia el balon raso que se convertiria en el 3-2. Minutos mas tarde, Puskas consigue el empate pero es anulado por un fuera de juego. Unos minutos despues y ante la estupefaccion del publico suizo (que habia celebrado las maravillas hungaras durante todo el campeonato) Ling decreta el final; Alemania Federal es el nuevo campeon y ha inaugurado una serie de gloriosas victorias, y los que es mas importante, un estilo.
Fritz Walter con el trofeo de Campeon |